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andresleot
El tema que ha monopolizado Internet en España los últimos meses ha sido la aprobación de la denominada Ley-Sinde, que permite cerrar sitios web que ataquen a los derechos de autor de cualquier tipo. Esto ha hecho que los usuarios se pregunten qué leyes existen en otros países y qué alternativas han tomado a la llamada piratería en Internet.
Cuando la Ministra de Cultura, Ángeles González Sinde, declaró que empresas que ofrecen servicios de visionado vía streaming de contenido multimedia no invierten en España por la cultura que caracteriza a este país del todo gratis, blogs dedicados a la tecnología decidieron ir un poco más allá.
Netflix es un servicio de pago por visionado de series y películas que tiene cierto recorrido andado en Estados Unidos y que este año quiere dar un salto internacional. Cuando se preguntó a Netflix la razón por la que no desarrolla este servicio en nuestro país, se envió un comunicado en el que si bien es cierto que existe preocupación por el alto grado de piratería en España la razón principal que hace que duden de su implantación es porque los derechos de autor de este país son de dos a tres veces más caros que en Alemania o Francia. Finalmente, Netflix ha anunciado su implantación en España en 2012.
Un poco lo mismo pasa con Amazon, empresa que comenzó vendiendo libros electrónicos, ebook, y que después de comprar la europea Lovefilm.com, que tampoco existe en España, ha creado el denominado Amazon Video on Demand. Y lo mismo pasa con ITunes, servicio de compra de música de Apple que creado un servicio de compra y alquiler de películas que, pese a encontrarse en diferentes países europeos, aquí no llega.
Si a todo esto le sumamos la diferencia de coste que tienen las líneas de ADSL en España con respecto a otros países y que para poder disfrutar de estos servicios se necesita una conexión rápida, parece que tienen que cambiar muchas cosas antes de poder ofrecer un servicio de estas características en España. Las alternativas a la piratería con respecto a otros países son ridículas.
Quizá algo de esto escuchó Álex de la Iglesia antes de dejar de ser el mayor defensor de la Ley Sinde y dimitir como Presidente de la Academia de Cine de nuestro país, ¿no les parece?
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7 comentarios:
First things first!! ¡¡Enhorabuena por el blog!! He estado un par de semanas fuera de cobertura y acabo de verlo. Esta noche leeré el resto de posts, a ver qué cuentas.
Sobre este tema, añadir a Spotify a la lista. Yo pago mi cuota religiosamente y tengo acceso a toda la música que tienen en catálogo, sin anuncios y separada en playlists a mi gusto. Y cuando llegue Netflix a España me apuntaré, porque salvo los vinilos (el sonido es inigualable) y algunos libros, el resto de soportes se están quedando obsoletos.
Desde luego la prohibición y las restricciones no son la solución (o sea, la ley Sinde). Si a los grupos les toca ir de gira año sí, año no, para sacar pasta, pues se hace. Si el cine en 3D no funciona, pues habrá que ofrecer algo atractivo en las salas para que la gente vaya. O reducir costes.
La supervivencia no es más que la capacidad para adaptarse a los cambios, y de momento la mastodóntica industria del entretenimiento va a paso de tortuga y cojeando. Se quejan porque es una "movida" cambiarlo todo xDDDD
Te seguiré leyendo. ¡¡Sigue así!!
Lo que no es normal es que haya cantantes que se quejen pero utilicen YouTube para promocionar, ratis, sus canciones. Para eso está la radio, por la que hasta ahora hemos estado pagando un canon ilegal.
En el tema de las películas opino como Álex de la Iglesia, Inernet es presente, no futuro. Ahora mismo estoy en Albacete, aquí hay un solo cine, de Yelmo, y al no haber competencia la enrada normal cuesta 9 euros y la sala 3D 12 euros. Así no entiendo cómo quieren que la gente no descargue ilegalmente.
Además las soluciones hay que ponerlas antes de las prohibiciones. No puedes cerrar páginas, impidiendo ver series que no llegan a España y que no hay otra forma de verlas, diciendo que vas a crear un servicio de venta online. El sentido común dice que primero lo crees y luego prohíbas...
Gracias por seguirme, por el RT y por el comentario Lula, seguimos en contacto ;)
Hola, algunas observaciones: La primera es que Netflix no ha dicho nada oficialmente sobre su llegada a España en 2012 ni sobre las razones de sus aplazamientos. Lo que hay son anuncios o explicaciones de terceras personas que dicen que les han dicho. Es su política, nunca han hecho anuncio oficial hasta que no ha ocurrido.
La segunda cuestión es que nadie debe esperar que Netflix sea la panacea de nada. Especialmente porque todo gira en torno a los derechos que puedan conseguir. De entrada, lo que hace la gente con series yonkis u otras descargas no va a ser posible: Netflix respeta las ventanas tradicionales, así que que nadie espere que lo que sale en EEUU está al día siguiente disponible.
En un nuevo comentario te añado una serie de valoraciones sobre la Ley Sinde.
La ley Sinde se realiza para proteger las ventanas de explotación protegiendo un modelo de propiedad intelectual que, en mi opinión es insatisfactorio para la sociedad. Por eso, la cuestión de fondo no es si la ley Sinde permite descargar o cerrar sitios porque tengan archivos o enlaces a archivos, sino qué propiedad intelectual queremos.
Así, la argumentación de fondo típica de la red, que se resumen en que como no hay Netflix, descargo, es intelectualmente inconsistente. La cuestión es cuánto privilegio se puede conceder a los creadores de obras artísticas para explortalas. La cuestión es qué es un creador y si es necesario dotarles de un monopolio para crear. Si todo se basa en libertad para descargar, entonces no se tiene razón, porque los creadores de series y películas trabajan y efectúan inversiones legítimas basadas en un marco legal real y vigente. Los "agujeros legales" por los cuales un enlace no es descarga o la falta de ánimo de lucro deja sin sentido la reclamación, son contradictorios con el derecho exclusivo de autores y productores.
Es decir, o se cuestiona esa formulación o éticamente no se puede defender la descarga.
Estoy totalmente de acuerdo en todo, Gonzalo. No hablo de que las descargas sean legítimas, sino que critico que se prohiba antes de dar una solución. Claro que el creador de una serie hace un trabajo por el que debe cobrar, pero ¿qué daño hago viendo en Internet una serie que no va a llegar a España? En este país sólo puedes ver las series en televisión y dobladas, o en versión original (algunas) con los subtítulos del teletexto creados para personas con problemas de audición.
Para mi, como digo lo normal sería que crearan un sistema, Netflix o cualquiera, que permitiera por pago o publicidad ver series y películas con opción a VO, VOS o doblada al castellano. Una vez que ese servicio funcione, se debe perseguir a los que se saltan la ley. Hasta entonces, no existe otra alternativa que la "pirata".
Pasa un poco lo mismo con la música. Nos dicen que no podemos descargarla. Nos dicen que no compramos CDs. Si compro un CD y quiero tener música en un MP3 o la compro en ITunes, pagando dos veces por lo mismo, o la descargo ilegalmente para poder llevarla donde quiera. O vuelve el discman a nuestras vidas. ¿Es que a nadie se le ha ocurrido poner un código dentro del libreto al comprar el Cd que permita su descarga legal para dispositivos portátiles?
Gonzalo, te aradezco tus comentarios y el debate abierto aquí, Marcos G. Piñeiro me ha recomendado seguirte y lo he hecho en Google+ pero, si no te importa, déjame tu Twitter para poder seguirte. Gracias y un abrazo.
Andrés, en primer lugar enhorabuena por el blog!!
Con respecto al tema del post me parece muy pertinente y brillante eso del código de descarga para dispositivos móviles. La industria desde luego, como siempre, está a años luz de saber adaptarse a las necesidades actuales de consumo de música.
Es más, por citar el caso 'legal' de iTunes. Yo he llegado a comprar discos legales a través del Apple Store de mi iPod. He intentado pasarlos a mi iTunes en el ordenador y me ha dado problemas la sincronización por no sé qué temas de licencias, por lo que al actualizar la última versión de mi dispositivo (iTunes está constantemente obligando a actualizar) he perdido lo que he comprado legalmente. A tomar por culo! Además con este modelo de iTunes y su Apple Store, ni siquiera puedo pasar a un amigo (práctica común y legal) la música que yo me he bajado legalmente.
Conclusión: me bajo los discos 'ilegalmente'.
Ahora bien, yo como músico, que practico las descargas 'ilegales' ocasionalmente y que ofrezco mi música gratis en internet todavía no acabo de entender si la gente quiere pagar por la música o no. Porque está muy bien eso de la cultura libre, la ilegalidad del canon (estoy de acuerdo), los músicos ricos que tienen mansiones en Miami y tal, pero como se sostiene una industria por la que no quiere pagar nadie por ella? Los conciertos, no? Ya, ya...
Muchas gracias por tu enhorabuena y tu comentario, Manu Grooveman!
Estoy totalmente de acuerdo contigo. Yo pienso que nos daremos cuenta de si la gente quiere pagar o no la música que consume el día que exista una alternativa legal que permita todo lo que estamos hablando. Desde luego, con el modelo de mercado que nos imponen, no podemos más que hacer cábalas sobre lo que pasaría. Como digo, primero crear el servicio y después perseguir a la gente que se salte la ley.
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