SAMSUNG DA CON LA TECLA

Hasta la presentación del Samsung Galaxy S, la compañía coreana había sido de las grandes, pero no de las más grandes. Antes del boom del IPhone y de la aparición del sistema operativo Android, los terminales de Samsung se caracterizaban por bonitos diseños y, a excepción quizás del Omnia, móviles que para nada destacaban en el mercado. Estoy hablando de los años en que Nokia miraba desde el podio a sus competidores porque había sabido adaptarse a las necesidades que demandaban los usuarios. No como ahora, empeñados en su propio sistema operativo, dando la mano al convulso Windows Phone y viendo cómo cada vez está más abajo en la listas de fabricantes.

Pero en 2010 aparece el Samsung Galaxy S y se convierte en uno de los teléfonos más vendidos de la historia. Especificaciones de gama alta y un diseño muy parecido al del IPhone le convierten en el empuje de la compañía. Diseño por el que ha sido denunciado por Apple, por supuesto. Un año después aparece el Samsung Galaxy SII y vende en un quince días tres millones de unidades. Con un diseño muy parecido al modelo anterior y unas especificaciones que se adaptan a la gran evolución que sufre el mundo de la telefonía estos últimos años.

¿Qué es lo que ha hecho bien Samsung? ¿Por qué ha llegado a la cima en dos años? Porque no ha tendido complejos, como Nokia. Porque cuando vio la oportunidad que brindaba Android a los fabricantes no se lo pensó y abandonó su sistema operativo, hasta el punto de que el segundo terminal que se ha fabricado de Google, el Nexus S, lo han fabricado ellos, y el tercero ya está en proceso.

Pero no acaba ahí la cosa. Aprovechando que Apple lleva anunciando años el IPhone en color blanco, Samsung se ha adelantado y ya está preparado para comercializar el Galaxy SII en este color. Si sumamos las características de este móvil a las ganas del usuario por tener un IPhone vestido de blanco no cabe duda de que más de uno comparará este terminal, aunque sea por desquite.

Además, Samsung acaba de anunciar que en agosto llega el Samsung Galaxy R, terminal de gama media/alta a muy buen precio, con el ojo puesto a los usuarios que no quieran gastar tanto dinero en su móvil. Una pantalla menos espectacular, un procesador menos potente, un poco más de grosor y un diseño casi idéntico a su hermano mayor hacen que casi seguro consiga ser otro superventas. 

Samsung, de la mano de Android y jugando en el límite de la legalidad con sus diseños, muy parecidos a la marca de la manzana, se está convirtiendo en una de las compañías más a tener en cuenta en el negocio de la telefonía.

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